La armeria (Armeria maritima) es una herbácea perenne, siempreverde y de ciclo frío, que se desarrolla tanto en Europa como en América.
En el caso particular de Argentina, esta pequeña mata se encuentra fundamentalmente en áreas montañosas.
De acuerdo con el Sistema de Información sobre Biodiversidad de Argentina (SIB), la armeria se registra en zonas montañosas de Córdoba y desde Neuquén hasta Tierra del Fuego, donde incluso se observa en zonas costeras.

No obstante, en Mendoza hemos observado armerias en zonas como El Salto.
Como ha sucedido con otras nativas, por ejemplo la Verbena bonariensis, sucesivas selecciones han mejorado ligeramente su aspecto natural para potenciar sus rasgos estéticos innatos con la finalidad de adaptarla mejor a los estándares del mercado de plantas para jardines.
Las armerias que cultivamos hoy son principalmente variedades que presentan un porte más compacto, un verdor más intenso en sus hojas y flores de un fucsia intenso o blanco, algo que las diferencia de las variedades nativas, que suelen ser de un rosa pálido.
Estas armerias "de mercado" también presentan mayor versatilidad y resistencia, lo que les permite desarrollarse exitosamente en ambientes más bajos, cálidos y urbanos que sus pares silvestres.
¿Cómo cultivar exitosamente a la Armeria maritima?
Aunque su aspecto diga lo contrario, las armerias son increíblemente resistentes a una variedad de condiciones.
Cuando la usamos por primera vez en un jardín, hace varios años, lo hicimos con cierta cautela. Sin embargo, es, sin dudas, la planta que más nos sorprendió en aquel entonces.
Hoy es una de nuestras herbáceas predilectas en el vivero.
No obstante, como cualquier otra herbácea, tiene requisitos para desarrollarse exitosamente.
Desde nuestra experiencia, es importante considerar que:
- Prefiere el pleno sol. No soporta para nada bien la sombra. Tiene todo el sentido del mundo, pues naturalmente crece en ambientes muy expuestos.
- Es muy exitosa en situaciones de sequía, pero agradece un riego regular, especialmente durante el primer año. Luego, su denso sistema radicular la dota de bastante resistencia.
- Es importante plantarla en suelos con tendencia arenosa o sueltos. Nuevamente, es lógico, pues sus variantes silvestres crecen típicamente asociadas a suelos rocosos.
- No tiene ningún problema con el frío, lo cual es esperable dadas sus áreas naturales.
¿Qué esperar una vez plantadas?
La armeria presenta un crecimiento muy compacto, que tiende a dispersarse lentamente en unos años.
Si eso ocurre, es propicio hacer una división de matas a finales del invierno, desechando las partes secas y quedándose con los extremos vegetativos.
Es una herbácea típica de ciclo frío: vegeta activamente, y según cada clima, desde finales del invierno y durante la primera mitad de la primavera; luego tiende a estancarse en los meses cálidos, sin desmerecer su aspecto.
El desarrollo y la adaptación son rápidos, especialmente cuando se planta en primavera, aunque no hay impedimento para plantarla en cualquier momento del año.
La floración es profusa e impactante, muy especialmente cuando se planta en grupos de al menos tres ejemplares.
¿En qué contextos utilizarla?
Por su compacidad, es una excelente opción para plantarla en senderos, rocallas o asociadas a rocas de mediano porte para dar un aspecto refinado y natural.
Su fina textura, parecida a la de un pasto, es ideal para generar contrastes interesantes.
También se desarrolla perfectamente en macetas. En estos casos, conviene cuidar más el riego.
¿Con qué otras especies acompañarla?
Cualquier herbácea de pleno sol y suelos con tendencia arenosa será buena compañera para la armeria.
Sin embargo, no podemos obviar su pequeño tamaño, por lo cual debemos pensar en plantarla junto a especies no demasiado grandes.
Acá te dejamos una selección:
Nasella tenuissima (estipa común) (VER EN LA TIENDA).
Calza perfecto por textura, color y tamaño. La estipa hará que la armeria destaque mucho más.
Salvia nemorosa "Dimension Rose" (salvia nemorosa) (VER EN LA TIENDA).
Erigeron karvinskianus (VER EN LA TIENDA).
¿Requiere algún mantenimiento?






